Del aceite de oliva virgen extra sabemos que le llaman oro líquido por sus preciosos tonos dorados, también por la forma en que se obtiene. Pero, sobre todo, son todas sus propiedades físico-químicas, las que le confieren ese valor que lo hace incalculable: el de la salud. A todos los beneficios que le otorgan su gran porcentaje de antioxidantes, se le suman los que podría tener en la lucha contra el Alzheimer. Y eso sin olvidar lo bien que le viene a la piel de las mujeres embarazadas o todos los usos que tiene para belleza, en general.
Sin embargo (y añadido a todo esto), ¿para qué más aspectos de nuestra salud es bueno el aceite de oliva virgen extra? ¿Cuántas cucharadas se recomienda comer al día? ¿Debemos consumirlo si estamos haciendo alguna dieta? A todas estas preguntas responde Laia Rivero, dietista-nutricionista de Fárfara Lab, en este vídeo de poco más de 3 minutos.
Y si sus argumentos te siguen sin valer, recuerda que hay 5 razones por las que incluir el AOVE en tus platos.
Fotografía | Miguel Ángel García Respenda
Si Acordo, un aceite de oliva virgen extra griego, sorprende por la sencillez de su diseño, Callegari seguro que lo hará por lo innovador de sus propuestas. Producido en España para ser comercializado en EE.UU., este AOVE ha decidido renovar su imagen inspirándose en las figuras y colores de los azulejos andaluces.
De entrada, destacan las botellas. De vidrio transparente, su forma, al mostrar el color dorado del aceite de oliva virgen extra, pretende simular una gota de oro. Lo mejor es que estas botellas pueden sostenerse inclinadas, como si fueran un decantador de vino. Con esta nueva funcionalidad y atractivo diseño, Callegari pretende ganar presencia en las mesas, desplazando a las aceiteras tradicionales.
Por otro lado, la tendencia de prestigiar el AOVE presentándolo en envases propios de un perfume alcanza en Callegari un punto cumbre con dos botellas gemelas con pera difusora incluída. Este formato está pensado para terminar aquellos platos que queramos dotar del protagonismo del aceite de oliva. Seguir leyendo
Italia y Grecia. Grecia e Italia, dos países representados en este aperitivo que hoy os traemos, hermanados por el aceite de oliva virgen extra. Me encanta el pan de ajo como entrante. Lo suelo hacer sobre todo en fin de semana, para cenar o viendo una película. Y el queso feta es uno de mis favoritos y siempre que puedo, lo cuelo en alguna ensalada, pero hoy lo traemos en formato dip, para comer untado en el pan de ajo o con unos nachos, patatas fritas o pan de pita.
Ingredientes (2 personas):
1 barra de pan. 1 diente de ajo. perejil. 200 gr. de queso feta en salmuera. el zumo de 1/2 limón. orégano. tomillo. sal y pimienta. aceite de oliva virgen extra agua.Preparación:
Cortamos el pan en rebanadas de un grosor medio. En un mortero, machacamos el diente de ajo con un poco de sal y el perejil picado. Cuando todo esté majado, añadimos aceite de oliva virgen extra y mezclamos. Escurrimos el queso feta de la salmuera y, en un plato y con ayuda de un tenedor, lo trituramos con el zumo del limón, un golpe de agua y 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Añadimos el orégano, el tomillo, la pimienta y mezclamos bien. Al conservarse en salmuera, no es necesario añadir sal. Reservamos en el frigorífico. Untamos las rebanadas de pan con el majado de ajo y las metemos en el horno, con calor por arriba y por abajo, hasta que se tuesten. Servimos el pan de ajo acompañado con el dip de queso feta frío o a temperatura ambiente, según más nos guste. Terminamos el dip con un chorro de AOVE.
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